Seguro que últimamente tus familiares y amigos ya han empezado a preguntarte qué regalo quieres para Navidad. Pues bien, si no tienes nada en mente, ¿qué mejor que pedir algo que te ayude a cumplir tus propósitos saludables del año que viene?

Relojes, camisetas, pulseras, gafas, bandas… El abanico de productos de este tipo que podemos encontrar en tiendas de electrónica y deporte no para de crecer pero, ¿realmente estos artilugios nos ayudan o perjudican a la hora de cuidar nuestros hábitos? Muchas veces es complicado estar de forma constante controlando lo que comemos o bebemos, lo que caminamos y lo que dormimos. Y por no hablar ya de la imposibilidad de controlar nuestro ritmo cardíaco, por ejemplo, otro de los servicios que ofrecen los wearables. Por lo tanto, en este sentido, estos complementos pueden convertirse en nuestros grandes aliados si queremos ser constantes y meticulosos con nuestra rutina saludable.

Para darte ideas, a continuación te dejamos ejemplos algunos de los wearables que están más de moda para que conozcas en qué pueden ayudarte:

• Smartwatches o pulseras inteligentes. Actualmente son los dispositivos más populares, ya que son capaces de acumular más datos sobre nuestro día a día: las horas que dedicamos al sueño, el ritmo de nuestras pulsaciones, los pasos que hacemos y las calorías que hemos quemado, e incluso, los niveles de glucosa en nuestro organismo. A través de esta información, será mucho más sencillo conocer qué hábitos debemos cambiar para llevar la vida lo más sana posible.
• Ropa inteligente. Aunque esta prenda aún está en proceso de desarrollo, en el mercado ya podemos encontrar camisetas que ayudan a mantener la temperatura óptima para nuestro cuerpo según el contexto o también algunas que nos informan de nuestra frecuencia cardíaca mientras hacemos deporte.
• Gafas inteligentes. El desarrollo de este dispositivo está orientado hacia personas que sufren problemas relacionados con la vista, aunque también se están diseñando aplicaciones para que quien las lleve, pueda saber, entre otros, en la calle en la que se encuentra o cómo seguir una ruta concreta (algo parecido a Google Maps).

Por otro lado, también cabe destacar que mucha gente ya ha manifestado su aversión ante el creciente uso de estos dispositivos. El motivo mayoritario es la creencia de que este tipo de tecnología está diseñada para controlarnos 24 horas al día. Y aunque este argumento no esté fundamentado, lo cierto es que hay que tener cuidado con el uso abusivo de los wearables. Cuando los llevamos siempre encima, es común que nos notifiquen de si hemos cumplido los objetivos marcados o no. Esto no debe hacer que caigamos en una obsesión por nuestro cuidado: vigilar nuestra salud está bien, pero también debemos tomarnos parte del día para descansar y desconectar si no queremos caer en el estrés y los nervios.

Si no sabes qué pedir a Santa Claus este año, apúntate a la moda de los wearables y haz que tus metas saludables de año nuevo sean más fáciles de conseguir.