Y es que el pixie es cómodo, favorecedor y muy femenino. Aunque hay quien lo prefiere para el verano, lo cierto es que cada vez son más las que se animan a llevarlo y disfrutar de todas sus ventajas durante todo el año. Aunque existen diferentes versiones, el pixie clásico es el que deja las orejas y la nuca despejadas y va acompañado de un flequillo largo, que es precisamente lo que nos dará ese toque más juvenil. Y es que el pelo corto puede llegar a quitarte años de encima y, además, es apto para todos los formas de cara.
Eso sí, antes de cortártelo, te recomendamos que consultes a tu peluquero. Seguro que él puede asesorarte cuál de las diferentes formas de pixie que existen es la más adecuada, según tu rostro. En función de tus rasgos, es posible que haya que pronunciar algunas zonas o disimilar otras. Así que escúchale porque nadie mejor que él sabe qué puede hacerte y qué no.
Por regla general, estas son las características que este corte de pelo debe tener en función de nuestro rostro:
- Cara redonda: Si lo que quieres es disimular un poco tus mejillas, pide a tu peluquero que te deje volumen en la parte de la coronilla. Así le restará protagonismo a tus mejillas.
- Cara triangular: El flequillo largo es indispensable si tienes este tipo de cara ya que disimulará tu frente y pronunciará más tus mejillas.
- Cara ovalada: Este tipo de rostro es el más agradecido porque permite cualquier tipo de corte. Así que puedes atreverte con el corte clásico.
- Cara cuadrada: Puedes acompañarlo con un poco de volumen en la parte posterior. Esto te ayudará a suavizar el mentón, que caracteriza este tipo de caras.
¿Te animas a la moda pixie? ;)